Cómo usar una tarjeta de crédito de forma inteligente

Cómo utilizar una tarjeta de crédito correctamente

Durante los últimos años el pago en metálico ha caído en picado. De hecho y según los últimos datos publicados por el Banco de España, han pasado de representar el 80 % de las transacciones (en 2014) al 36 % actual. Un cambio que aceleró la pandemia y que, en contrapartida, incrementó los pagos a través del móvil y la tarjeta. También mediante las de crédito, ideales para financiar compras. En este escenario saber usarla de forma inteligente es clave. 

Y es que, al utilizar una tarjeta de crédito, en realidad estás disponiendo de un dinero que no es tuyo, que te ha prestado el banco y que tendrás que devolver en tiempo y forma. De hecho, si no actúas de manera responsable puede llegar un momento en el que la deuda sea demasiado elevada y tengas problemas. Para ahorrártelos, recopilamos unos consejos que más tarde desgranamos con detalle: 

• Establecer un presupuesto.
• Usarla solo en compras grandes. 
• Revisar periódicamente los movimientos de la cuenta. 
• Pagar las cuotas a tiempo. 
• No sobreendeudarte.
• Aprovechar sus ventajas.
• Cuidar de la seguridad de la tarjeta. 

Establece un presupuesto

Para manejar una tarjeta de crédito de forma inteligente, es importante que tengas claros todos los ingresos y las deudas pendientes que tienes, su cuantía, fechas de cobro y de pagos. Incluye no solo los importes fijos, sino también los variables haciendo una media de los últimos 12 meses. De esta manera obtendrás una visión realista de la salud de tus finanzas.

Otra de las ventajas de hacer un presupuesto es que sabrás cuál es la cantidad máxima de dinero que puedes gastar sin dañar tus finanzas. Para ello puedes aplicar la regla 50/30/20, según la cual el 50 % de tus ingresos han de ir dirigidos a gastos imprescindibles, el 30 % a gastos no esenciales y ocio, y el 20 % a ahorrar e ir creando un colchón de emergencia.

Utiliza la tarjeta de crédito solo en compras grandes

Un error habitual es usar las tarjetas de crédito para pagar cualquier tipo de compra, desde un importe elevado (por ejemplo, adquirir una lavadora) a un importe pequeño (una cena en un restaurante). Si bien es cierto que se puede utilizar en ambos casos, no es lo más recomendable.

El problema de usarla para pagos pequeños es que pueden pasarnos inadvertidos, pero van sumando. A la larga se va acumulando con otros y se convierten en una cuantía considerable que deberemos devolver al banco.

Revisa periódicamente tu cuenta

Es imprescindible que lleves un control periódico del uso de tu tarjeta de crédito. Lo puedes hacer mirando los movimientos de tu cuenta bancaria, a través de la web o la aplicación móvil de la entidad, o bien revisando el extracto que te manda el banco cada mes (si es el caso). Deberás de fijarte en: 

• Pagos efectuados, su cuantía y las fechas concretas. 
• Línea de crédito disponible para utilizar en tus compras.  
• Tipo de interés que te aplican, concretamente si ha variado o sigue siendo el mismo. 

Otra opción es instalar alguna app de control de gastos, para saber a qué destinas el dinero exactamente.

Paga debidamente las cuotas y no te sobreendeudes

Es fundamental que seas responsable y pagues todas tus deudas en tiempo y forma. Esto significa que debes de tener dinero suficiente en tu cuenta bancaria de cara a afrontar los sucesivos pagos que el banco te irá cargando. Es por ello por lo que un plan financiero, como dijimos anteriormente, te ayudará a saber cuándo llegará cada pago y su cuantía; así como organizarte mejor.

Intenta no solicitar más préstamos, ya que la suma de todas tus deudas puede llegar a alcanzar niveles que sobrepasen tu capacidad económica, entrando en una situación delicada con un daño a tu historial crediticio, riesgo de intereses de demora e incluso embargos como última instancia. 

Para evitar llegar a esa situación, la clave radica en solicitar préstamos únicamente  imprescindibles, y siempre teniendo en cuenta tu nivel de ingresos económicos, manteniendo en todo momento una relación realista entre el dinero que entra y el que sale de tu cuenta bancaria. 

Aprovecha los puntos y ventajas de la tarjeta

Las tarjetas de crédito suelen llevas asociados una serie de ventajas que deberías de aprovechar. Cada entidad bancaria suele ofrecer unas determinadas, pero por regla general podemos enumerar las siguientes: 

• Tienen programas de descuento y de puntos. Por ejemplo, utilizar la tarjeta en determinados establecimientos puede suponer un porcentaje de descuento de la compra, o bien ir acumulando puntos para canjear más adelante. 
• En muchos casos ofrecen seguros gratuitos, tales como el de protección de compras, el de viaje, etc.

Refuerza la seguridad

Uno de los aspectos más importantes es la seguridad y protección de la tarjeta de crédito. Basta con que sigas una serie de consejos para mantenerla a salvo: 

• No compartas nunca con desconocidos (incluso tampoco con conocidos), la información de tu tarjeta, es decir, el número, la fecha de vencimiento, el código de seguridad... 
• No utilices la tarjeta en páginas webs poco fiables, es decir, comprueba que tienen el protocolo de seguridad HTTPS, verifica opiniones de otros clientes, etcétera. 
• Crea una contraseña compleja. 
• Comprueba periódicamente tu cuenta y el extracto de la tarjeta para detectar movimientos inusuales. En tal caso, informa rápidamente al banco. 
• Si has perdido la tarjeta o te la han robado, desactívala e informa a tu entidad. 

Qué más tener en cuenta al usar una tarjeta de crédito

Más allá de estos consejos para el uso inteligente de la tarjeta de crédito, es recomendable que tampoco pierdas de vista otros aspectos como:

Costes asociados: comisiones y tipos de interés

Las tarjetas pueden llevar distintos cargos: emisión, renovación, retiradas en cajeros, uso en el extranjero o por impagos. Algunas son gratuitas, otras pueden llegar a superar los 200 euros anuales. Si aplazas pagos, se aplica un interés que suele estar entre el 2 % y el 27 %, dependiendo del tipo de tarjeta y tu perfil. Consulta siempre las condiciones en el contrato. El coste real varía mucho según el uso que hagas de la tarjeta. 

Riesgos y consecuencias de no pagar a tiempo

Si usas la tarjeta a crédito, recuerda que debes devolver lo gastado. Si te retrasas, se aplicarán intereses de demora (hasta un 20 %) y comisiones por impago (hasta 39 euros). Si la deuda persiste, podrían embargarte bienes para recuperar el dinero.

¿Qué pasa si pierdes la tarjeta?

Ante una pérdida o robo, llama inmediatamente al banco o emisor para bloquearla. Así evitarás ser responsable de operaciones no autorizadas. Solo tendrás que asumir hasta 150 euros si hubo uso fraudulento antes del aviso. También conviene presentar denuncia y revisar tu cuenta.

¿Puedo pedir más crédito?

Sí. Puedes solicitar que se aumente tu límite, ya sea de forma puntual (para gastos imprevistos como los de Navidad) o permanente. El banco estudiará tu perfil y, si cumples los requisitos, te lo concederá.

¿Cuántas tarjetas necesitas realmente?

No es obligatorio tener varias, pero puedes considerar una adicional si quieres separar gastos (por ejemplo, una para compras del hogar y otra para viajes o pagos online). Eso sí, asegúrate de que no te supongan costes innecesarios.

Preguntas frecuentes

¿Todavía tienes alguna duda pendiente? No te preocupes, a continuación, puedes ver las preguntas que con mayor frecuencia nos plantean nuestros usuarios, para que las resuelvas fácilmente.

¿Cómo usar una tarjeta de crédito por primera vez?

Lo primero que tienes que hacer al usar una tarjeta de crédito la primera vez es leer detenidamente sus términos y condiciones para evitar sorpresas desagradables. También es recomendable aprovechar que algunos bancos ofrecen tipos de interés del 0 % para nuevos clientes, de manera que haciendo compras a plazos puedes beneficiarte.

 ¿Cómo utilizar responsablemente el saldo de una tarjeta de crédito?

El saldo se refiere a la línea de crédito que tienes disponible para utilizar. Debes utilizarlo con responsabilidad, no agotarlo enseguida y menos aún en compras innecesarias, ya que luego tendrás que devolverlo con intereses. Ten en cuenta, además, que podrían surgirte gastos inesperados ante los que no podrías utilizar la tarjeta de crédito. 

¿Cómo saber si puedo usar mi tarjeta de crédito?

Hay dos maneras sencillas de comprobar si puedes usar la tarjeta de crédito. Basta con entrar en tu cuenta a través de la página web del banco o a través de la app y allí verás si la tarjeta de crédito se encuentra activada o no.  

Otra forma sería intentando comprar algo con la tarjeta y viendo si aceptan el pago. Además de porque no se encuentre activada, hay otras razones para que te rechacen la tarjeta de crédito, en cualquier caso. 

Elige la mejor tarjeta de crédito

Ya conoces las ventajas que puedes disfrutar por disponer de una tarjeta de crédito y cuáles son los consejos más importantes para utilizarla de manera inteligente, sin sobresaltos o sorpresas desagradables cuando toque devolver el dinero junto con los intereses.

Así que, si todavía no tienes una tarjeta de crédito o bien deseas pedir otra, te recomendamos que entres en el comparador de tarjetas de Acierto.com. Te ayudamos a encontrar la tarjeta ideal para ti y siempre con excelentes condiciones. Entra y analiza los detalles de las tarjetas de las principales entidades de nuestro país, Fácil y rápido.