El simulador de seguros de decesos de Acierto.com permite analizar rápidamente las coberturas y condiciones generales de las principales aseguradoras del ramo. Para saber cómo responderá el seguro de defunción cuando no estés.
Todo en un proceso rápido y sencillo: solo tendrás que responder unas preguntas y, automáticamente, el comparador te ofrecerá un listado de pólizas personalizado. Olvídate de navegar por diferentes webs durante horas.
La muerte de un ser querido es uno de los momentos vitales más difíciles de afrontar. Por desgracia, al duelo se suman otras preocupaciones, como cuánto cuesta un entierro como realizar todos esos trámites inevitables al gestionar la muerte de un familiar y otras situaciones con las que resulta muy complicado lidiar.
Contar con un seguro de defunción evita esta situación. Porque se ocupa de los trámites, costea los servicios funerarios del asegurado, acompańa a la familia y, en definitiva, organiza cada aspecto del sepelio. Ayudarte a contratar el mejor, con todas las garantías, es nuestra misión y la de nuestro comparador.
Un seguro de decesos cubre el coste de los servicios funerarios, las gestiones administrativas relacionadas con el fallecimiento, los traslados del cuerpo... Algunas pólizas, además, incluyen servicios que el asegurado usará en vida, como teleasistencia y orientación médica telefónica. En detalle:
Servicios funerarios
La aseguradora se encargará de cubrir todos los gastos desde que el asegurado fallece hasta que es inhumado. Esto es, de asumir el coste de elementos como el féretro, el coche fúnebre, la tanatoestética del difunto, la lápida, etc. El límite será el capital asegurado. Si el coste de los servicios funerarios es inferior a la suma asegurada, la compańía deberá reembolsar el capital excedente a los familiares.
Gestiones administrativas
Mediante esta garantía, la aseguradora proporciona ayuda en las gestiones administrativas posteriores a la defunción. Un gestor profesional se hace cargo de todo el papeleo: obtención del Certificado de Defunción, inscripción en el Registro Civil, baja del libro de familia y de la Seguridad Social, etc. Además, los familiares recibirán asesoramiento continuo. Por eso, no es solo un seguro de muertos: es un seguro que piensa en los que se van y en los que se quedan.
Incineración/inhumación
Cubre el coste de la incineración o del servicio de inhumación del fallecido, que incluye las tasas por la cesión de un nicho por el mínimo tiempo disponible. La elección de una u otra vía (entierro o cremación) dependerá de la elección de la familia o de la decisión del fallecido en vida. No obstante, cada aseguradora fija condiciones a considerar.
Atención psicológica
Algunas compańías de seguros ofrecen un servicio de gestión del duelo a los familiares del fallecido. Puede ser telefónico o presencial; inmediatamente después del fallecimiento o en sesiones programadas. Pero siempre con la atención de psicólogos expertos en el proceso de duelo.
Traslado del fallecido
Se refiere a cualquier traslado del fallecido para ser velado en la funeraria e inhumado en el cementerio. También cubre los gastos de traslado del asegurado en caso de que haya fallecido en un lugar que no es el de su residencia. Esta prestación de traslados es útil tanto para desplazar al fallecido dentro del territorio espańol como para repatriarlo en caso de que haya muerto fuera de Espańa. Pero puede tener unos límites (de gastos, de kilometraje, etc.).
Testamento online
Gracias a un seguro de decesos es posible solventar dos asuntos en uno: el sepelio y la herencia. Gracias a la ayuda del equipo legal de la compańía puede elaborar su testamento online (también el vital) y expresar sus últimas voluntades. La aseguradora se encarga de coordinar la firma con el notario. Además, la garantía suele incluir un cambio anual gratuito. Es uno de los muchos servicios extra que puede incluir: un seguro de muertos también se usa cuando estás vivo.
Servicio de borrado de vida digital
Con el servicio de borrado de huella digital algunas compańías se hacen cargo, bajo petición expresa de los herederos del fallecido, del borrado de su rastro en Internet. Esto incluye la eliminación de sus perfiles en redes sociales y en blog, sus cuentas de correo electrónico y otras medidas. La familia también puede disponer de asesoramiento técnico para tramitar la solicitud de retirada de resultados de búsqueda de Google, amparándose en la normativa de protección de datos europea.
Como ocurre con otras pólizas, los seguros de decesos pueden tener exclusiones y carencias.
Aunque su denominación puede variar de una aseguradora a otra, lo habitual es que existan tres tipos de prima en los seguros de decesos:
En aquellos casos en los que el cliente supera una determinada edad (entre 65 y 70 ańos) y no ha suscrito un seguro de decesos previamente, su única opción es un seguro de defunción de prima única. En este tipo de seguro de decesos se abona toda la prima en una sola cuota de entre 3.500 euros y 5.000 euros. Algunas compańías permiten fraccionar el pago en varias mensualidades.
Los servicios funerarios son mucho más que el propio entierro. Hay un gran número de decisiones que tomar y de elementos que, de pagar por separado, supondrían un gran desembolso: arca (féretro) y sudario, lápida, flores, colocación de capilla ardiente, tanatoestética, tanatosala, vestición del difunto, personal de asistencia, catering, traslados, vehículos fúnebres, servicio de inhumación o incineración, cesión de nicho o columbario y un largo etcétera.
El acceso a un seguro se complica con dolencias graves. Por ejemplo, si padeces un cáncer, tumor, e incluso si recientemente has sufrido un infarto. No ocurre lo mismo si lo has superado. Ahora bien, esto podría suponer una sobreprima. También si se padecen enfermedades crónicas, como la diabetes.
Desde el 2016 no es obligatorio comunicar a la compańía que nuestra salud ha empeorado. Además, los seguros de defunción incluyen una cláusula de indisputabilidad que impide a la compańía dar de baja la póliza por esta razón. Es decir, el asegurado no debe preocuparse por contraer una enfermedad después de firmar el contrato.
La antigüedad en un seguro de decesos no tiene la misma trascendencia que en otro tipo de seguros. Más que el hecho de llevar un número de ańos en la compańía pesa el hecho de cumplirlos, per se cuando se trata de un seguro de defunción de prima natural. Porque esta aumenta a medida que el asegurado va cumpliendo ańos.
No se puede afirmar que un seguro sea mejor que el otro. Hay situaciones y necesidades diferentes para las que cada póliza responderá mejor. Si solo necesitas dejar cubiertos los gastos del sepelio, basta un seguro de decesos. Si lo que necesitas es dejar un capital a tu familia o garantizar la amortización de un préstamo (como una hipoteca), un seguro de vida te dará lo que necesitas.