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Solo a 3 de cada 10 conductores les sale a cuenta su seguro de coche a todo riesgo sin franquicia


  • Un seguro a todo riesgo sin franquicia es un 128% más caro que uno con franquicia
  • Habría que dar 3 partes con culpa al año para sacar partido a la póliza
  • Los mayores de 60 años son los que más seguros de este tipo contratan

Madrid, 22 de noviembre de 2016.- Siempre que se contrata un seguro se busca prevenir posibles eventualidades, como costes derivados de accidentes en los que la responsabilidad recae en el asegurado. Por ello, los conductores más previsores y cautelosos optan por las pólizas de automóvil a todo riesgo sin franquicia, ya que garantizan que la aseguradora se hará cargo de todos los gastos en caso de siniestro. Ahora bien, sacarle partido a estos seguros en muchos casos es difícil: según un estudio realizado recientemente por el comparador de seguros Acierto.com (www.acierto.com), 7 de cada 10 conductores de los que contratan estos seguros pierden dinero, ya que no llegan a cubrir el precio de estas pólizas.

Según ha declarado  Carlos Brüggemann, cofundador de Acierto.com, “los datos arrojados por el estudio que hemos realizado muestran que las compañías de seguros tratan de potenciar la contratación de pólizas de auto con franquicia frente a la modalidad sin franquicia. Uno de los probables motivos es que los conductores que deciden contratar un seguro con franquicia suelen ser más comedidos a la hora de dar un parte de daños con culpa, lo que supone un ahorro para las compañías de seguros”.

Y es que el precio medio de los seguros sin franquicia se sitúa en 1.037 euros anuales, mientras que los seguros con franquicia disminuyen hasta 454 euros. Con estos datos, y tras analizar más de un millón de pólizas de más de 30 aseguradoras, se ha llegado a la conclusión de que, para poder sacar partido a estos seguros, se deberían dar 3 partes de accidentes con culpa anuales. Por tanto, hay que valorar si nos sale a cuenta pagar más del doble (un 128% más caro) por un seguro que no sabemos si nos va a ser necesario. A esto hay que sumarle que el 67% de los contratantes de pólizas a todo riesgo sin franquicia han declarado no haber dado ningún parte en los últimos 5 años. Este exceso de precaución ha costado de media a estos conductores más de 2.250 euros.

Cabe destacar que estas diferencias llegan a ser incluso 4,8 veces superior en algunas compañías, lo que elevaría a 5 los partes necesarios para sacar partido al seguro. La diferencia mínima entre ambas modalidades nunca es inferior a 1,2, por lo que se puede afirmar que en el 100% de aseguradoras, sale más a cuenta contratar un seguro de coche a todo riesgo con franquicia aunque se de un parte de daños con culpa al año.

El estudio también ha revelado que la mayoría de estas pólizas a todo riesgo sin franquicia las contratan mayores de 60 años a pesar de que, estadísticamente, son los que menos utilizan el coche, con una media de 8.400 km al año. Una de las razones que explicarían esto es que este colectivo es uno de los más propensos a utilizar coches de lujo (la cuota de conductores de vehículos Mercedes Benz pasa de un 3,5% a los 50 años, a un 6,5% a los 60 años y a un 11,6% a los 70).

El concepto “franquicia”

La franquicia es la parte de los costes que paga el asegurado en caso de que ocurra un accidente del que es responsable. La compañía, a cambio de una reducción importante en la cuota anual, no se hace responsable de la totalidad de los costes en caso de siniestro. En función de la aseguradora la cantidad suele oscilar entre los 90 euros y los 1.200 euros.

Según datos de Acierto.com un 20% de los usuarios que realizan comparativas en este portal busca un seguro a todo riesgo con franquicia, el doble de los que comparan pólizas sin franquicia. Lo que motiva a los usuarios a contratar un seguro a todo riesgo es haber dado un parte con culpa en los últimos 5 años (esto se da en el 33% de comparativas). En el caso de las pólizas con franquicia, el porcentaje desciende hasta el 26%.