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Conseguir préstamos rápidos con ASNEF puede resultar complicado si no sabes a quién recurrir: muchas entidades suelen rechazar a clientes cuyos nombres aparecen en listados de morosidad, básicamente porque lo consideran un riesgo de impago.
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Los préstamos con ASNEF son un tipo de financiación urgente destinada a personas cuyos nombres figuran en listados de morosidad. Es decir, que tienen deudas pendientes. Una característica que les sitúa en una tesitura complicada.
Es por eso por lo que los préstamos a los que pueden acceder tienen unas condiciones un tanto peculiares: comisiones más elevadas, requisitos más estrictos, importes menores, plazos de amortización breves, peores tipos de interés, algún aval como el coche... Razón de más para analizarlos bien antes de pedir un préstamo con ASNEF online.
Cuando vayas a pedir un préstamo con ASNEF te van a exigir que cumplas con varios requisitos. La mayoría son similares a los que se requieren al solicitar cualquier otro crédito, pero pueden variar en función de la entidad. Estos son los más comunes:
E incluso haber cumplido los 21, 23 o 25, según la entidad.
Y tener una cuenta bancaria en una entidad del país.
Justificables para garantizar la devolución del préstamo
Que no sean bancarias ni superen cierto importe.
Para que una entidad conceda un minipréstamo con ASNEF se tienen que cumplir varios requisitos. Estos pueden variar en función de la política que tenga, al respecto, la financiera. Estos son los más comunes:
En ocasiones, y en función de la entidad, te pueden pedir algunos papeles extra como un justificante de ingresos, el aval de un bien (habitualmente un coche), que las deudas por las que se te inscribió en ASNEF no sean bancarias o que no superen cierta cantidad.
Estos son algunos de los aspectos clave en los que te deberías fijar cuando vayas a contratar un crédito con ASNEF:
Depende. Lo más habitual es que las condiciones de los préstamos con ASNEF sean más duras que las de financiaciones destinadas a personas que no han estado nunca inscritas en listados de morosos. El motivo, y generalizando, las entidades consideran que las personas que han estado en alguna ocasión en uno de estos ficheros tienen un perfil de mayor riesgo; pueden recaer en un impago: bien porque no son responsables con sus finanzas bien porque tienen ingresos insuficientes.
Sí. Debido a las condiciones de los créditos con ASNEF, más estrictas que otro tipo de préstamos, es de capital importancia que vayas con cuidado a la hora de solicitar y contratar uno.
Entre otros, estos son algunos de los principales signos indicativos que te deben hacer sospechar:
Aunque cada caso es un mundo, en principio no es recomendable pedir un préstamo para salir de ASNEF ya que corremos el riesgo de sobreendeudarnos y caer en una espiral sin salida. Si estás en ASNEF y tienes varias deudas pendientes, deberías contemplar, antes de pedir un préstamo para amortizar una de ellas, otras vías. Por ejemplo, una reunificación de pago.
Dejar de pagar un préstamo, estés en ASNEF o no, es muy mala idea. Incluso aunque hablemos de cantidades de dinero bajas, los intereses que se pueden acabar generando con el impago pueden llegar a ser altísimos y meternos en un problema.
